La parada biológica es indispensable para regenerar el caladero del Golfo de Cádiz
La zona del litoral del Golfo de Cádiz está a punto de concluir su parada biológica en su caladero para respetar el periodo de reproducción, regeneración de especies y llevar a cabo tareas de mantenimiento de la flota y descanso de los marineros y armadores.
Esta veda interpuesta y negociada por las distintas administraciones, lonjas y armadores se está llevando a cabo desde el 15 de septiembre y concluirá el próximo 1 de noviembre.
La falta de actividad se reflejará en la prohibición de la captura del pulpo que puede afectar a unas 280 embarcaciones y, sobre todo en su mayoría, a la pesca de arrastre de fondo, donde están la mayoría de las especies que llegan a la Lonja de Ayamonte y que están en parada biológica. Son las que se encuentran en el fondo marino como las gambas, sepias, calamares, pescadillas. Las embarcaciones que están en parada obligan a descansar a marineros y armadores y a la vez se realizan las operaciones de mantenimiento y revisión de las embarcaciones.
Como excepción, al no haber parada en Portugal, hay embarcaciones con esa nacionalidad y otras que mediante acuerdos siguen faenando y trayendo capturas a la lonja.
